Después

 

Jamie Conklin, el único hijo de una madre soltera, solo quiere tener una infancia normal. Sin embargo, nació con una habilidad sobrenatural que su madre le insta a mantener en secreto y que le permite ver aquello que nadie puede y enterarse de lo que el resto del mundo ignora. Cuando una inspectora del Departamento de Policía de Nueva York le obliga a evitar el último atentado de un asesino que amenaza con seguir atacando incluso desde la tumba, Jamie no tardará en descubrir que el precio que debe pagar por su poder tal vez es demasiado alto.


Dolores Claiborne

Una novela íntima y espeluznante, repleta de horrores que, sin embargo, provienen de este mundo. Durante treinta años, los habitantes de Little Tall Island han esperado averiguar qué pasó durante el extraño día —el día del eclipse total— en que murió el marido de Dolores Claiborne. Ahora es la policía quien quiere averiguar qué pasó ayer cuando la rica mujer para la que Dolores hacía las tareas domésticas, una mujer postrada en la cama, murió repentinamente. Sin otra opción más que hablar, Dolores presenta su conmovedora confesión de los lazos extraños y terribles que han forjado sus intimidades ocultas, de la ferocidad de un amor maternal y sus abominables consecuencias, de la ira silenciosa que puede llenar de odio el corazón de una mujer. Cuando Dolores Claiborne es acusada de asesinato, las malas noticias no hacen más que empezar.

IT

Es 1958 en el pequeño pueblo de Derry, Maine, y varios niños han sido encontrados asesinados. Bill Denbrough y sus seis mejores amigos creen que los asesinatos están relacionados con algo que se esconde debajo de su ciudad natal, algo que salió de sus pesadillas y se formó en los rincones oscuros de las alcantarillas. Impulsados por fuerzas invisibles, Bill y sus amigos sienten que tienen lo necesario para detener al monstruo. Prometen, con un trozo de vidrio roto cortado en sus palmas, regresar a Derry si el mal alguna vez regresa. Veintisiete años después, los asesinatos han comenzado de nuevo. Es hora de que Bill y sus amigos honren su voto.